Con 25% de deserción docente y la pérdida de 1.2 millones de alumnos, nada más en los niveles de primaria y secundaria, el sistema educativo nacional vive una enorme crisis. Para discutir sobre las repercusiones de estas cifras, el pasado jueves 24 de febrero se llevó a cabo, en el campus Montalbán de la UCAB, el foro “¿Quién está educando en nuestras instituciones educativas? Formación permanente y éxodo del docente venezolano” organizado por la Facultad de Humanidades y Educación y la Escuela de Economía de la universidad, con apoyo de la Fundación Konrad Adenauer.
El encargado de la moderación fue el decano de la Facultad de Humanidades y Educación, José Francisco Juárez, mientras que los ponentes fueron: Luisa Pernalete, coordinadora de Educación para la Paz de la red Fe y Alegría; Tulio Ramírez, investigador y director del Doctorado en Educación de la UCAB; y Leonardo Carvajal, investigador del Centro de Investigación y Formación Humanística (CIFH) de la UCAB y fundador de la ONG Asamblea de Educación.
Luisa Pernalete comenzó su intervención afirmando que “sin docentes no hay escuela”, haciendo hincapié en lo que señalan los documentos presentados por la Unesco sobre la educación por la calidad, en los cuales se destaca que el docente es uno de los pilares en la sostenibilidad de la calidad educativa, de allí la atención que merece.
También comentó que la crisis venezolana en materia educativa es previa a la pandemia. Esta vino a empeorar la situación, especialmente en la educación pública que concentra el 85% de la población en edad escolar. También justificó que las cifras aportadas por ellas u otros educadores siempre serán aproximadas porque no cuentan con datos oficiales. Ella propone que se tiene que declarar la educación en emergencia y concretar un pacto educativo entre los distintos sectores del país en defensa de la educación. 3. Luisa Pernalete 22
Tulio Ramírez, afirmó que el problema de la calidad educativa es un asunto que por igual compete a las instituciones públicas, privadas y pertenecientes a los Municipios del país. En otras palabras, es un fenómeno que ocurre en todos los niveles y sectores del sistema educativo y no es un asunto exclusivamente salarial porque hay otras profesiones que tienen igual sueldo que los docentes, sin embargo, la deserción no ha sido como en educación. ¿Por qué ocurre eso? Porque tiene que ver con un reconocimiento social que en este momento no existe. Hay un problema vocacional que se debe atender porque en este momento los pocos que se están formando para ser docentes no tienen perspectiva de futuro.
Las causas que expone el docente, a partir de un registro realizado por él desde el año1996 hasta el año 2018 sobre los niveles de insatisfacción del docente venezolano, son las siguientes: control político, injerencia de terceros en los asuntos de la vida escolar y especialmente en la evaluación del desempeño docente, aplicación de diferentes criterios en la actividad académica, imposición de textos escolares, pérdida total de los beneficios económicos, pérdida del espacio de libertad.
Lo anterior trae como consecuencia que no hay generación de relevo. Los números al respecto son abrumadores (ver el documento in extenso con los datos aportados por el docente) donde se dice que en la Universidad Pedagógica Experimental Libertador, por ejemplo, se pasó de tener en el año 2008 105.000 estudiantes a 42000 en el 2020. Es decir, un 77% menos. Lo mismo ocurre en las otras instituciones de formación docente. 3. Luisa Pernalete 22
En este sentido la propuesta es clara. Se necesita un viraje en las políticas de gestión de la educación venezolana. Las instituciones de formación docente tendrán que organizar cursos gratuitos para desarrollar competencias docentes en quienes están asumiendo las horas de clase en las escuelas y liceos del país. 4.Tulio.Qué pasa con los maestros (1)
Leonardo Carvajal comentó que la realidad que se vive con los docentes universitarios ha cambiado en el tiempo porque el sueldo se ha depreciado con en las últimas décadas. Por ejemplo, en los años setenta, un docente a tiempo convencional en la Universidad Central de Venezuela podía ganar cerca de 700 dólares al mes. Actualmente ningún docente en esa institución llega a 50 dólares, aunque sea doctor con escalafón de titular.
La radiografía que presentó de la educación venezolana concuerda con lo expresado por los ponentes que le precedieron, sin embargo, para él no hay que dedicarse al lamento ni a las denuncias. Por eso propuso enfrentar el problema en los siguientes términos. Hay que hacer un cambio radical de estrategia. No se puede seguir insistiendo en las carreras de formación docente porque no hay vocaciones y no hay reconocimiento social a su labor. Entonces hay que apoyar a los que están. Y eso tienen que hacerlo las instituciones de formación docente. Eso implica concretar un plan de formación y certificación.
No se puede seguir ofreciendo carreras largas en educación. Hay que cambiar la oferta a cursos cortos. Para las instituciones de educación superior que son públicas, propone organizar fondos de solidaridad con aportes económicos de las familias de los estudiantes que tengan condiciones para costear los estudios de sus hijos. En ese sentido se debe desterrarse el mito de la gratuidad de la enseñanza en el nivel superior. En la discusión de la Ley de Educación universitaria que se está realizando actualmente tiene que plantearse una redistribución del presupuesto educativo. 2.Carvajal. Tres propuestas sobre éxodo laboral (24-02-2022) (1)
Los ponentes coinciden en la problemática del sistema educativo venezolano. Sigue siendo un fraude en tanto no responde a los fines de la educación como espacio para la modernización y la formación en la ciudadanía democrática. Hay consenso en señalar que nuestro sistema educativo es excluyente, hay déficits de docentes, se presentan graves problemas de infraestructura y de falta de servicios básicos, se considera que hay un maltrato laboral al ejercicio docente en todos los niveles del sistema educativo producto de los bajos salarios que perciben y del poco reconocimiento social.
Se plantean al menos cuatro sectores de atención prioritaria con el concurso de la tríada Educación, sociedad y familia: docentes (mejores salarios, formación permanente, reconocimiento social, generación de relevo, seguridad social), estudiantes (inclusión, formación de calidad, dotación de herramientas tecnológicas), currículo (actualización curricular, nueva Ley de Universidades) e infraestructura (servicios básicos, dotación de herramientas tecnológicas, nuevas instalaciones educativas).